top of page
Search
  • Writer's pictureIvan Salinas Melo

RECORRIENDO POR EL BINARIO: MASCULINO Y FEMENINO

Updated: Aug 20, 2022

Se cuestiona el carácter dicotómico y binario del género y la sexualidad, descartando las posiciones deterministas que asumen a la homosexualidad como algo naturalizado, antes bien se pone en evidencia el carácter maleable del género al analizar las maneras en que se construyen nuevas categorías de representación además del gay; como es el caso de las “locas”, “las maricas”, “la emplumadas” y “las fuertes”. Dar cuenta de las diversidades identitarias, nos significa también dar cuenta que existen varias formas de ser hombres y gays.


“Que dentro de las diversidades sexuales periféricas, al margen del círculo imaginario de la sexualidad gay “normal”, se ejercen desde distintos ámbitos otras masculinidades homosexuales adyacentes originadas muchas de ellas en “la resistencia” a los valores heteronormativos y tradicionales que se nos han impuesto en la sexualidad a los hombres y mujeres homosexuales, y que históricamente han sido rechazados, estigmatizados y discriminadas de las prácticas sexuales socialmente aceptadas en el mundo homosexual. Realidades que existen y que además son todas colocadas en el mismo plano: “la Marginación y el rechazo”. (Rich 1996)


Esta falta de decoro y normalidad de aquellas prácticas y orientaciones masculinas gay feminizadas. Se expresan en el concepto “de las sexualidades periféricas, marginales, subalternas”, porque desestabilizan la norma, y por ende lo establecido. Esta forma rara, torcida, extraña de vivir las sexualidades por parte de algunos hombres homosexuales feminizados rompe con la “sagrada naturalización” que se ha hecho de lo que se considera ser homosexual. (Rich 1996).


Desde este marco, “las sexualidades periféricas / subalternas” y el género han sido hermanados, pues ambos discuten y reflexionan sobre la sexualidad y las identidades masculinas feminizadas, reformulando con ello nuevos procesos de identificación y de diferenciación en torno a la sexualidad. (Butler 2007)


Bajo esta visión, los comportamientos tan criticados como los amaneramientos de algunos gays, con su imitación particular del género revelan la estructura imitativa propia del género. Desde esta perspectiva se entienden las categorías identitarias como instrumentos de regímenes regularizadores, tanto si obran como categorías normalizadoras de estructuras opresoras. (Lugones 2011)


Conjugar esta visión histórica y procesal de que existen hombres gays distintos a lo establecido en el statu quo de la homosexualidad masculina predominante nos lleva a plantear que no basta tener biológicamente genitales; somos lo que somos, y que además estamos auto determinados socialmente a ser lo que se nos dice ser. Todos indistintamente, caemos en este normal y hegemónico designio. Esta concepción heredada, como nos dicen algunos autores es una designación social; autoimpuesta por otros, decidido hegemónica y normalmente, a quien es quien, en el plano de la sexualidad, ajustando con ello a todos a las diversas reglas del discurso científico, biológico, natural y verdadero. (Foucault 2007).


Como observamos existe entonces una asimetría entre los géneros y lo que se da en base al control social de la sexualidad de los cuerpos de los hombres gays, situación que se evidencia cuando se intenta romper con estos estigmas de la homosexualidad masculina feminizada, intentando con ello rebajarles y menoscabarles porque sus identidades evidencian un sesgo de lo femenino en las masculinidades gays. Esta performatividad alude a otras complejidades que se deben considerar en el plano de la sexualidad, y es al tema del deseo y el placer. Entonces es falaz cuando pensamos que en la sexualidad gay existe una sola forma de ser, en tanto, lo que existe es el control y posesión de dichos cuerpos y deseos. Este control sobre nuestros cuerpos y deseos opera en forma estratégica a través de la producción de un tipo de discurso acerca de lo que es la sexualidad y la homosexualidad gay. La “sexualidad y homosexualidad gay” no es un dato “natural” sino el “correlato” de una práctica discursiva que se impone. (Butler 2002).


El poder dar cuenta de esta realidad, de ciertas maricas feminizadas, no puede ser solo desde el plano de la teoría, se requiere ser vista desde ciertos contextos sociales y de homosociabilidad, donde interactúan con otras masculinidades gays, e incluso donde podemos de mejor forma hacer inteligible estos discursos estigmatizadores, discriminadores y hegemónicos hacia aquellas masculinidades gays feminizadas.


Es de esta forma donde se puede evidenciar de mejor manera cómo actúan dichas identidades gays feminizadas. Desde este punto nos parece importante esta mirada de algunos espacios de interacción social, tales como en su propia organización GBLTTI y desde distintos espacios diversos; espacios de homosociabilidad específicos, en las cuales las diversas experiencias de masculinidades. Por lo tanto, la finalidad es también desde aquí exponer y desconstruir sus comportamientos, practicas, discursos y espacios donde estos hombres gays feminizados circulan. (Hames-García 2011).

MSc. en Género y Desarrollo

Ivan Salinas Melo

SOCIOLOGO

Art by Joel Chalen

89 views0 comments

Heading 1

bottom of page